Recomendación


No calentar la leche a temperaturas inapropiadas para evitar la descomposición de nutrientes y almacenar adecuadamente.


Choosing Wisely Italy. Doing more does not mean doing better (Fare di più non significa fare meglio)    (Italian Federation of Registered Nurses' Colleges – Pediatric Nursing Area)


La exposición de la leche a altas temperaturas (más de 80 ° C [176 ° F]) puede inducir cambios en el perfil de ácidos grasos si se compara con la leche materna fresca. Para evitar la destrucción de nutrientes, se debe respetar la preparación correcta. La evidencia muestra que los principales cambios en la leche recalentada afectan a los aminoácidos esenciales para el crecimiento humano. Debe garantizarse el correcto calentamiento de la leche (en particular las fórmulas en polvo) a una temperatura no inferior a 70 ° C (158 ° F) para evitar la proliferación de bacterias, de las cuales la más común y temida es E. sakazakii, responsable de meningitis, septicemia y enterocolitis necrosante. Una vez que el envase está abierto, un almacenamiento adecuado de leche artificial (líquido o preparado) es fundamental: la leche debe permanecer en el refrigerador a 4 ° C (39,2 ° F) hasta su siguiente uso, ya que reduce el crecimiento bacteriano si en comparación con temperaturas entre 5 - 65 ° C. (41 a 149 ° F).


Idioma:

Inglés

Especialidad:

Enfermería, Pediatria y cirugía pediátrica

Año Publicación:

2016

Tipo de Intervención:

Preventiva

Tipo de Recomendación:

Bajo valor

Fuente:

Link to the recommendation on the website of the initiative / Enlace a la recomendación en la página web de la iniciativa